Las nuevas tecnologías están cada vez más presentes en el día a día. Cambiar, innovar y digitalizar procesos es indispensable para poder dar una respuesta rápida y eficiente a las necesidades de la comunidad.

Como idea, el concepto está claro. Y, sin embargo, en la mayor parte de municipios de España, los planes de protección civil aún consisten en 150 páginas impresas, guardadas bajo llave en un armario.

Y la realidad es que las inundaciones, las tormentas, las nevadas o los incendios no ocurren siempre en horario de oficina. Pueden surgir un sábado cualquiera, en un momento en que el alcalde o el responsable de protección civil está de excursión con su familia, a dos horas de ese armario donde está almacenada la información que se necesita.

La gestión sería tanto más fácil si, desde su teléfono móvil, pudiera acceder al plan de protección civil y a todos los contactos necesarios.

Porque, ante una emergencia, no hay tiempo de revisar papeles. Se deben tomar las acciones necesarias, de forma inmediata.

La información debe estar al alcance de quienes la necesitan, para poder empezar a gestionar el problema cuanto antes y garantizar la seguridad de las zonas más sensibles. Y esto es lo que la transformación digital de los planes de protección civil permite lograr.

¿Qué necesidades cubre un plan de protección civil digital?

Aún hay mucho por hacer en la implementación de las medidas para enfrentar las emergencias. Los ayuntamientos y organismos públicos responsables de su gestión necesitan cubrir ciertas necesidades básicas para aumentar su eficiencia, entre ellas:

           -Mejorar la respuesta frente a las emergencias. Necesitan tener acceso a la información                          desde cualquier sitio, y en cualquier momento.

          -Compartir la información con los organismos y asociaciones involucradas (bomberos,                           protección civil…). Cada ayuntamiento tiene que poder decidir quién más tendrá acceso al plan de              emergencia y, así, poder distribuir tareas de forma rápida y efectiva.

          -Tener una red ya creada con estas asociaciones y organismos. De esta manera, se                                   asegurará que el aviso de activación del plan llegue a todos. Cuando surge una emergencia no es               el mejor momento para crear grupos de WhatsApp, en los que puede quedar gente fuera y donde              la información se pierde fácilmente.

          -Conocer quiénes son las personas que podrían verse afectadas ante una emergencia y                           poder llamarles de inmediato. ¿Hay masías afectadas? ¿Refugios de montaña? ¿Restaurantes u                    hoteles rurales? Ante una incidencia, unos minutos pueden hacer la diferencia.

          -Tareas preasignadas: al activar el plan, cada uno ya sabe lo que tiene que hacer.

          -Una activación eficiente e inmediata del plan, que permita acceder con más facilidad a                           posibles ayudas post-emergencia. Es indispensable contar con un plan elaborado, homologado y               haberlo activado correctamente, para poder recibir ayudas públicas. 

Todas estas necesidades, esenciales para garantizar la seguridad, se pueden cubrir al digitalizar el plan de protección civil.

¿Cómo funciona un plan de protección civil digital?

 Los mismos datos de un plan tradicional, la misma información, accesible de forma visual, simple y directa, en cualquier momento y desde cualquier lugar. En eso consiste un plan de protección civil digital.

Mediante un acceso directo en el móvil, Tablet o PC, las personas responsables de protección civil podrán acceder a un mapa de la zona, donde se destacan elementos como, los puntos vulnerables (escuelas, masías, hoteles rurales, residencias…).

Desde el mismo mapa podrán contactarles con un solo clic. O, si lo necesitan, podrán tener una vista aérea de la zona.

Además, desde el mismo sitio, podrán tener acceso a:

          - el organigrama de las personas responsables y sus funciones,

          - información sobre riesgos y recursos,

          - los datos de contacto de los responsables y colaboradores,

          - y a una biblioteca con información de consulta.

Y lo más importante, desde el mismo mapa podrán activar el plan, enviando avisos automáticos a aquellos grupos o elementos establecidos como prioritarios (elementos vulnerables, servicios de emergencia, centros de confinamiento…).

Además, el mapa permite conexión fácil con otros elementos externos como, por ejemplo, sensores en el río que permitan tener información continua del caudal del mismo, pudiendo activar automáticamente el plan y enviando los avisos correspondientes.

De esta manera, los ayuntamientos y equipos de protección civil pueden reaccionar de forma rápida y precisa ante cualquier eventualidad.

Porque, en definitiva, la tecnología aporta la gran oportunidad de ser más efectivos en la protección de las personas.

¿Trabajas en un ayuntamiento o en protección civil y te interesa aumentar la seguridad y mejorar la respuesta ante emergencias en tu zona? Escríbenos aquí y te explicaremos cómo podemos ayudarte.